Comunidad educativa del Guamo denuncia riesgo por tapia caída en colegio

Los denunciantes aseguran que no se trata solo de un tema de infraestructura, sino de una situación que puede desencadenar una emergencia mayor. “Esto es un peligro para los niños y los docentes. Cualquiera puede entrar al colegio sin control”, señaló uno de los padres afectados.

La falta de soluciones ha generado un ambiente de incertidumbre en la institución. Los docentes advierten que, mientras no se atienda la emergencia, la integridad de los estudiantes está en juego, y recalcan que el llamado no es nuevo: desde el mismo momento en que cayó la tapia se han hecho múltiples solicitudes para recibir apoyo.

Una denuncia que pone en evidencia la falta de atención

Lo ocurrido en la sede Kennedy refleja, según líderes comunitarios, la falta de inversión en infraestructura educativa en varias zonas del departamento. “Parece que hasta que no ocurra un accidente no se toman cartas en el asunto”, expresó un representante de los padres de familia, quien insistió en que el colegio requiere soluciones de fondo.

La denuncia también despierta interrogantes sobre la capacidad de respuesta de las autoridades locales. Para la comunidad, resulta incomprensible que un caso que compromete la seguridad de los niños siga sin atención inmediata. “No estamos pidiendo lujos, solo que se garantice un espacio seguro para estudiar”, añadieron.

Riesgo de intrusos y afectación emocional

Más allá del peligro físico, la caída del muro ha generado un ambiente de temor e inseguridad entre los estudiantes. Algunos niños manifiestan miedo de que extraños ingresen al colegio, lo que afecta su concentración y su rutina diaria. “Esto no es un simple daño, es un tema que golpea la confianza de la comunidad en el cuidado de sus hijos”, puntualizó una docente.

Además, padres de familia advirtieron que el deterioro en la infraestructura escolar puede convertirse en un precedente para otros problemas. Si no se actúa de manera oportuna, el colegio podría enfrentar mayores dificultades estructurales en el futuro.

Un llamado urgente a las autoridades

La comunidad educativa insiste en que se requiere voluntad política y gestión administrativa para dar solución a este problema. Tanto padres como docentes piden que el caso sea priorizado en la agenda del municipio y que se gestionen recursos, incluso a nivel departamental, para garantizar que los estudiantes puedan asistir a clases en condiciones seguras.

“Nuestros hijos no pueden seguir estudiando con miedo. El colegio debe ser un lugar de confianza y tranquilidad, no un espacio vulnerable”, expresaron algunos padres durante una reunión convocada de urgencia.

Mientras tanto, la tapia caída continúa siendo una alerta latente en el Guamo. Los afectados reiteran que el llamado no es solo por infraestructura, sino por la protección de la niñez, que debe estar por encima de cualquier excusa administrativa o presupuestal.

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