Con un avance del 90% avanza la construcción del “rancho” de la cárcel de Rivera (Huila)
Después de años de espera, promesas inconclusas y dificultades logísticas, la cárcel de Rivera —centro penitenciario que presta servicio al municipio de Neiva y a otras localidades del Huila— está a punto de ver finalizada una de sus obras más esperadas, el nuevo rancho o cocina institucional, un espacio que busca mejorar las condiciones de alimentación y salubridad de la población privada de la libertad.
Con un avance del 90%, el proyecto se perfila como un paso importante hacia la dignificación de la vida carcelaria y la garantía de los derechos humanos de las personas detenidas.
La noticia fue confirmada durante el desarrollo de la tercera Mesa Penitenciaria de 2025, a la que asistieron la Personería Municipal de Neiva, la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría Regional y Provincial de Neiva, la secretaría de gobierno, entre otros actores.
Estos espacios, creados para revisar el estado de los centros de reclusión y coordinar acciones de mejora, han servido para hacer seguimiento a los compromisos adquiridos meses atrás. En esta ocasión, la actualización más relevante fue el reporte del avance físico de la cocina, una infraestructura que durante años fue considerada una deuda pendiente con el sistema penitenciario del departamento.
“Después de un largo periodo de espera, hoy podemos decir que la obra del famoso rancho está prácticamente terminada. Según el informe entregado por representantes del USPEC, a más tardar el 30 de noviembre estará culminada en un 100% la fase de infraestructura blanca, y ya se han instalado los equipos industriales necesarios para la preparación de los alimentos”, explicó el personero de Neiva, Jerson Bastidas.
El proyecto incluye la instalación de marmitas industriales, ollas de gran capacidad, cuartos fríos y sistemas de ventilación que garantizan una manipulación adecuada de los alimentos, condiciones que hasta ahora eran precarias.
De acuerdo con la información entregada, el siguiente paso será la dotación final del espacio con utensilios, electrodomésticos y demás elementos requeridos para iniciar operaciones, proceso que podría completarse en el primer semestre de 2026.
La terminación de esta obra representa un avance histórico en materia de dignificación carcelaria, pues durante años la alimentación en el centro de Rivera se ha realizado en condiciones limitadas, con espacios improvisados y sin la infraestructura adecuada.
La falta de un rancho en condiciones óptimas ha sido uno de los principales factores de inconformidad tanto para los internos como para los operadores del sistema penitenciario, que han debido enfrentar múltiples quejas y riesgos sanitarios.
El personero de Neiva destacó que este logro es el resultado de un trabajo articulado entre las entidades del Ministerio Público y la presión constante de las mesas penitenciarias. “Hemos insistido en que las cárceles no pueden ser espacios de olvido. Allí también deben garantizarse los derechos básicos, y la alimentación digna es uno de ellos”, señaló.
La Personería de Neiva insistió en que continuará haciendo seguimiento a los compromisos adquiridos, para que las obras no se queden en anuncios y puedan traducirse en verdaderas mejoras para la población reclusa.