1 Jun 2017 05:58 PM

Crisis financiera de la UT se convirtió en problema moral por el poder burocrático: Sindicatos

Alerta
Tolima

El Sindicato de los Trabajadores y Empleados Universitarios de Colombia – SINTRAUNICOL – Subdirectiva de la Universidad del Tolima, ante la persistente crisis que atraviesa la Universidad, manifestó lo siguiente:

1. Existe una inmensa preocupación ante el silencio permanente de la administración frente a las solicitudes reiterativas del movimiento estudiantil, quienes durante el mes de mayo del presente han adelantado un cierre parcial del ingreso a la Universidad del Tolima, las cuales no han sido atendidas ni resueltas de fondo.

2. Observamos con extrañeza el cambio intempestivo del lugar en el cual se desarrolló la rendición de cuentas para la vigencia 2016 -Marzo 2017: de la sede los Ocobos a la sede en Chaparral. El argumento principal de esta administración es que “el campus universitario es uno solo, independientemente de la sede”, sin embargo, llama la atención que aunque en palabras y documentos se jactan de estar construyendo una nueva universidad, con los hechos se desconoce la mayoría de la comunidad universitaria, negando tajantemente la posibilidad de generar espacios participativos, críticos y democráticos.

3. Rechazan que la administración actual insista en adjudicarnos falsas erogaciones a través de los medios de comunicación; hacemos la claridad que SINTRAUNICOL, hasta la fecha no ha tomado vías de hecho en la reclamación de los derechos adquiridos en términos de ley, siendo consecuentes y mostrando coherencia con la crisis universitaria.

4. Rechazan la falta de planeación por parte de la administración para la consecución de recursos frescos que permitan subsanar la actual crisis de la Universidad del Tolima, pues la política de “alivio presupuestal” que asfixia a la clase trabajadora y a la misión académica de la institución, es una evidente incapacidad de proyectar seriamente los procesos que integran a la comunidad universitaria.

5. Manifestaron la preocupación ante el bajísimo nivel de inscripciones para el semestre B de 2017 y la poca o nula difusión por los medios masivos de comunicación de la actual oferta académica. Lo anterior, evidencia que la administración carece de planeación estratégica comunicativa, orientada a brindar la oferta académica a nuevos estudiantes para la Universidad del Tolima. La “Nueva Historia” no logra hacer frente a los bajos niveles de inscripción para el semestre B 2017.

6. Por otra parte, el índice de ingresos por inscripción ha disminuido considerablemente debido al cambio abrupto en el proceso del mismo, el cual ha generado desinformación, traumatismo y desinterés por parte de los aspirantes, siendo la población de los centros regionales la más afectada por los inconvenientes de conectividad en la zona
rural, lo que limita su posibilidad de acceder al centro de educación superior.

7. Denunciamos el no pago o desembolso a la Superintendencia de Seguridad para la vigencia 2016 y la falta de gestión para el pago 2017, que asegura la legalidad del funcionamiento del servicio de seguridad y vigilancia en la Universidad del Tolima.

8. Siendo un derecho colectivo establecido en el Art. 32 del Decreto 1045 de 1978, solicitamos el pago de la prima de navidad del 2016, al igual que la dotación en condiciones de equidad y calidad conforme a la misma vigencia como lo establece la Convención y los Acuerdos Colectivos.

9. Se exige que la administración universitaria muestre y materialice una verdadera voluntad política de ahorro, en razón a que las primas técnicas de los directivos, derechos de representación, viáticos y salarios onerosos persisten en las altas orbes directivas, lo cual deja en entredicho el esfuerzo por superar la crisis financiera.

10. Denunciamos que el Consejo Superior Universitario ha invalidado la participación de los trabajadores en la construcción de la propuesta del Estatuto General; el proceso se ha realizado bajo la metodología del sectarismo y la imposición de pensamientos que es inconsecuente con una verdadera democracia.

Leer También: Estudiantes de la UT cumplen más de 24 horas de toma pacífica a la sede Los Ocobos

SINTRAUNICOL reiteró que la estructura administrativa es un soporte funcional de la academia y hace parte de la comunidad universitaria, por lo tanto considera que es un derecho participar en la realización de reformas que no afecten los procesos misionales de la institución, considerando pertinente que la toma de decisiones para la mitigación de la crisis financiera de la universidad sea un acto en el cual todas las partes conscientes y consecuentes con el gasto público, consideren que los aportes de cada sector tiene que ser propuesto y visualizado de manera equitativa.

Leer También: Universidad del Tolima entre las 10 mejores del país en Derecho

La Universidad ha sobrepasado los límites de la crisis financiera convirtiéndose en una crisis moral en la cual la “autonomía universitaria” ha sido secuestrada y reformada a conveniencia de quienes se enfilan al asalto del futuro poder burocrático.

Le puede interesar: