
Festival Folclórico Colombiano celebra sesenta y seis años como instrumento de paz y unidad nacional
En el corazón de la Capital Musical de Colombia, el Festival Folclórico Colombiano se prepara para celebrar su quincuagésima primera versión, consolidando una tradición que nació hace sesenta y seis años como respuesta cultural a la violencia que azotaba al país. La génesis de este emblemático evento se remonta a 1959, cuando el folclor de toda Colombia llegó a Ibagué para quedarse, concebido como un instrumento de paz en tiempos de profunda división nacional.
Una aventura del corazón que transformó la cultura nacional
La visión fundacional del festival quedó plasmada en las palabras de sus creadores, quienes lo concibieron como "una gran aventura del corazón". Adriano Tribín Piedrahíta logró crear la más maravillosa y tradicional idea de cultura con visión de futuro, no era una fiesta local, era la fiesta que congregaría las fiestas de todo el país. Esta perspectiva ambiciosa estableció desde el inicio las bases de lo que se convertiría en el evento folclórico más importante de Colombia.
La conceptualización original del festival trascendía los límites geográficos tradicionales para proponer una celebración de alcance nacional que pudiera servir como punto de encuentro para las diversas expresiones culturales regionales. Esta visión integradora respondía a la necesidad de crear espacios de confluencia en un país fragmentado por la violencia política y social.
Los visionarios que forjaron una tradición cultural
El nacimiento del Festival Folclórico Colombiano fue posible gracias a la convergencia de tres personalidades excepcionales que compartían una visión común sobre el poder transformador de la cultura. Antonio Zambrano, Guillermo Angulo y Adriano Tribín, tres hombres con visión, mucho amor por la cultura y el conocimiento suficiente para ser conscientes de que era lo único que podía llegar al alma del pueblo en las circunstancias críticas que atravesaba no solo el Tolima, sino todo el territorio nacional.
Estos precursores culturales comprendieron intuitivamente que el folclor poseía una capacidad única para trascender las divisiones políticas y sociales, conectando con aspectos profundos de la identidad nacional que permanecían intactos a pesar de los conflictos. Su apuesta por la cultura como herramienta de sanación social demostró una comprensión adelantada de las potencialidades del arte como factor de cohesión comunitaria.
La Junta Municipal de Turismo como cuna del festival
La materialización de la idea festivalera encontró su marco institucional en la Junta Municipal de Turismo, organismo que se convirtió en la cuna del Festival Folclórico Colombiano. Estos hombres representativos crearon la Junta Municipal de Turismo donde nació el Festival Folclórico Colombiano, de una idea de Tribín, para el que la fiesta folclórica era afín a todos los bandos del conflicto.
Esta institucionalización del proyecto cultural garantizó su viabilidad y continuidad, proporcionando la estructura organizativa necesaria para desarrollar un evento de la magnitud y complejidad que requería la visión original. La Junta Municipal de Turismo se convirtió así en el primer ejemplo de articulación institucional entre el sector público y la iniciativa cultural privada en el ámbito festivalero colombiano.
Un festival nacido para aliviar la angustia ciudadana
El contexto histórico en el que surgió el festival otorga especial significado a su propósito fundacional. La celebración fue concebida como una manera de aliviar la angustia de la ciudadanía y contribuir a la construcción de la paz en una época marcada por la guerra bipartidista y conflictos agravados por la presencia de grupos armados. Esta función terapéutica del festival evidencia cómo la cultura puede operar como mecanismo de resistencia y sanación en contextos de crisis social.
La primera versión del festival se desarrolló entre el 22 y 29 de junio de 1959, estableciendo un precedente histórico que perduraría a lo largo de más de seis décadas. La selección de estas fechas, en pleno desarrollo del conflicto bipartidista, representó un acto de valentía cultural que desafió las circunstancias adversas del momento.
Respaldo institucional desde todos los niveles de gobierno
La legitimidad y viabilidad del festival fueron reforzadas por el respaldo institucional obtenido desde los diferentes niveles de gobierno. La idea fue consultada con el gobierno departamental en cabeza de Rafael Parga Cortés, el municipal con el médico Luis Eduardo Vargas Rocha y hasta el gobierno nacional cuyo presidente en el momento era Alberto Lleras Camargo. Este apoyo institucional transversal demostró el reconocimiento oficial del potencial del festival como herramienta de pacificación y construcción de identidad nacional.
La participación de tres mujeres destacadas en el proceso de consulta y validación del proyecto añadió una dimensión de género fundamental para la legitimidad social del evento. Leonor Buenaventura de Valencia, Aída Saavedra de García y Amina Melendro de Pulecio participaron en la reunión con el presidente Lleras, evidenciando el carácter inclusivo y participativo que caracterizó la gestación del festival.
Reglas claras para neutralizar la confrontación política
Los organizadores establecieron normas específicas para garantizar el carácter apolítico y pacífico del evento. Las reglas quedaron claras, desde el vestuario en adelante, esta era una fiesta que se vestía de campesino, para que los colores partidistas no afectaran la celebración y las fuerzas del estado no debían intervenir. Esta reglamentación evidencia la comprensión profunda de los organizadores sobre los factores que podrían comprometer el carácter conciliador del festival.
La prohibición de la presencia de fuerzas estatales y la adopción del vestuario campesino como código de vestimenta oficial crearon un ambiente de neutralidad que permitió la participación de personas de diferentes filiaciones políticas sin temor a represalias o confrontaciones. Esta innovación organizativa se convirtió en un modelo para eventos culturales en contextos de conflicto.
Una primera versión que marcó el rumbo festivalero
El desarrollo de la primera versión del festival estableció tradiciones que perduran hasta la actualidad. Hubo misa para conmemorar las víctimas y desplazados, luego desfilaron las reinas de los barrios de Ibagué, las delegaciones municipales, y los políticos hicieron presencia. Esta estructura ceremonial combinó elementos religiosos, cívicos y políticos en una síntesis que reflejaba la complejidad de la sociedad colombiana.
La inclusión de un componente de memoria y reconciliación a través de la misa por las víctimas demostró la sensibilidad social de los organizadores y su comprensión del festival como espacio de sanación colectiva. La música y la danza se tomaron todo el evento, pero el componente gastronómico también ocupó un lugar destacado, evidenciando la concepción integral de la cultura que orientaba la celebración.
El nacimiento de una leyenda: Sonia Osorio y su ballet
Una de las anécdotas más significativas de la primera versión del festival involucra el surgimiento de una de las compañías de danza más importantes del país. Una joven maestra de danza vino a acompañar a la representante del Atlántico quien se alzó con la corona, su "comparsa" y la reina fueron invitados a todos los eventos posibles y la muestra folclórica era tan buena que se convirtieron en la compañía de ballet folclórico más grande de Colombia.
Esta maestra era Sonia Osorio, quien en 1960 fundó el Ballet de Sonia Osorio después de haber participado en la primera versión del Festival Folclórico Colombiano. Este ejemplo ilustra cómo el festival operó como catalizador de iniciativas culturales que trascendieron el evento mismo para contribuir al desarrollo del sector artístico nacional.
Betty García: la primera reina cívica del folclor
La institucionalización de la figura de la reina cívica del folclor constituyó uno de los elementos más duraderos del festival. La primera reina cívica del folclor fue la señorita Betty García y desde ese instante ha sido uno de los íconos del Festival Folclórico Colombiano. Esta tradición estableció un modelo de representación que combina la belleza física con el conocimiento y la promoción de las tradiciones culturales regionales.
La figura de la reina cívica trasciende el aspecto ceremonial para convertirse en embajadora cultural del festival y del folclor colombiano. Betty García se convirtió así en la primera de una larga lista de mujeres que han contribuido a la proyección nacional e internacional del evento ibaguereño.
Un legado de múltiples protagonistas
La historia del Festival Folclórico Colombiano está tejida por múltiples protagonistas que han contribuido a su consolidación como el evento cultural más importante de Colombia. Son muchos los nombres que hacen parte de esta historia, desde los visionarios fundadores hasta los artistas, organizadores y participantes que han mantenido viva la tradición durante más de seis décadas.
Esta multiplicidad de protagonistas refleja el carácter colectivo y participativo que ha caracterizado al festival desde sus orígenes, evidenciando cómo una idea cultural puede convertirse en patrimonio compartido cuando logra conectar con las aspiraciones y necesidades profundas de una sociedad.
De 1959 a 2025: sesenta y seis años de transformación cultural
El Festival Folclórico Colombiano cumple sesenta y seis años de existencia, llegando a su quincuagésima primera versión con la autoridad que otorga haber demostrado su capacidad de adaptación y permanencia. Desde su concepción original como instrumento de paz hasta su consolidación actual como símbolo de unidad nacional, el festival ha mantenido su esencia mientras evoluciona para responder a los desafíos de cada época.
Para Alerta Tolima tu opinión cuenta, comenta las noticias de nuestro Portal, envíanos tus denuncias, conviértete en nuestros ojos donde la noticia se esté desarrollando, escríbenos al WhatsApp a través de este link
Haz parte de alertatolima en WhatsApp: encuentra información actualizada, videos, imágenes de lo que sucede en Ibagué, el Tolima y el centro del país.
Comenta las noticias de nuestro Portal, envíanos tus denuncias, conviértete en nuestros ojos donde la noticia se esté desarrollando, escríbenos al WhatsApp a través de este link