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Cortolima
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25 Nov 2019 10:29 AM

Escándalo en Cortolima, Funcionario estaría cobrando coimas para dar licencia ambientales

Samuel
Barreto Bonilla
La Fiscalía investiga estos hechos en los que tambien está involucrado un ganadero tolimenese.

Un funcionario de Cortolima y un empresario agropecuario, fueron capturados por personal del CTI de la Fiscalía, puesto que sobre ellos corre en curso una investigación donde se les involucra en varios hechos de presunta corrupción y cobro de coimas para otorgar licencias ambientales.

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Las dos personas, identificadas como Israel Miranda Toro, Revisor fiscal de Cortolima, y el ganadero Juan Carlos Troncoso fueron presentados ante los estrados del Palacio de Justicia, donde escucharon los hechos narrados por la Fiscalía 30 de la dirección Especializada contra la Corrupción, que señala a los acusados de pedirle dinero a varias empresas para agilizar el proceso de autorización de licencias para poder adelantar labores comerciales y de producción económica.

El señor Juan Carlos Troncoso Rengifo fue capturado en la capital del Tolima, frente a un local comercial ubicado en la carrera 4ta número 11. Entretanto Israel Miranda Toro también fue aprehendido por miembros del Cuerpo Técnico de Investigación en una cafetería ubicada en el Centro Comercial Combeima.

Según se pudo establecer, los sospechosos fueron materia de seguimientos por parte del ente judicial, quienes adelantaron las respectivas pesquisas para recolectar elementos materiales probatorios y de esta forma, el 22 de noviembre se emitió la orden de captura en contra de estas dos personas.

En lo dado a conocer por el ente investigador, las empresas a las cuales el funcionario y el ganadero pretendían cobrar estas coimas fueron el Grupo BIOS y la Avicola Tripe A – S.A.S.

Y es que precisamente, el 17 de octubre el señor Israel Miranda y el ganadero Juan Carlos Troncoso se reunieron con Hernando Mesa Jaramillo, representante del Grupo BIOS, donde Troncoso le dijo a Mesa Jaramillo que para agilizar un proceso que él estaba esperando, la única forma era contar con la ayuda del revisor fiscal de Cortolima, Israel Miranda.

Fue así como se habría acordado el pago por parte del Grupo BIOS de más de 400 millones para ser repartidos entre las oficinas jurídicas y técnicas de Cortolima y así agilizar el proceso de autorización de las licencias Sello, para poder trabajar en una granja de levante ubicada en Alvarado, misma autorización que había sido negada en el 2015.

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Con lo que no contaba el funcionario y el ganadero era que señor Mesa Jaramillo grabó las llamadas en las cuales se daba cuenta de este accionar ilícito e instauraría la correspondiente denuncia ante la fiscalía, entregando las pruebas que acompañaban sus acusaciones.

Por el momento avanzan las investigaciones en contra de los capturados, teniendo en cuenta que, según le contaron a esta redacción, la misma Corporación Ambiental estaría colaborando con la Fiscalía, esperando que en las próximas diligencias que se adelanten en contra de los dos capturados se conozcan más detalles sobre los hechos por los cuales fueron capturados Miranda Toro y Juan Carlos Trocosa.