
El toque de queda para menores en las comunas 6, 8, 9 y 10, medida administrativa adoptada por la Alcaldía, a través del Decreto 0322 de 2025, ha comenzado a mostrar sus primeros resultados. La iniciativa busca garantizar los derechos, la seguridad y la protección integral de los niños, niñas y adolescentes, a través de un ejercicio de control ciudadano y acompañamiento institucional que, por ahora, ha sido recibido con satisfacción por gran parte de la comunidad.
Según las autoridades municipales, la primera semana de aplicación de la medida ha sido positiva y menos conflictiva de lo esperado. De acuerdo con lo informado, se temía un rechazo inicial de los padres de familia y acudientes; sin embargo, el balance muestra una buena recepción y un respaldo visible de la ciudadanía.
"En el ejercicio de toda esta semana ha sido positivo, ha sido menos de lo que habíamos pensado que posiblemente íbamos a encontrar pero de alguna otra forma eso es lo que nos permite dar a entender es que todos los canales que hemos utilizado para hacer llegar el mensaje, ha sido efectivo y de alguna otra forma los padres de familia cuando recorremos los barrios de la comuna sin duda nos manifiestan la importancia de esta medida y el respaldo que nos da enfrente a ello", indicó el Director de Seguridad y Convivencia Ciudadana, Alexi Javier Trujillo.
Uno de los aspectos destacados ha sido el papel de los medios de comunicación y las campañas de socialización, que, según la administración, han sido determinantes para que la comunidad conozca el alcance de la medida. Los canales informativos han logrado generar conciencia entre los padres y acudientes, evitando confusiones sobre los alcances de esta política pública.
"En el transcurso de esta primer semana, en las dos caravanas que arrancan una hacia el sur y otra hacia el norte, hemos encontrado un número significativo, digamos que en esta semana hemos podido encontrar no solamente a los niños y adolescentes sino también a los padres de familia e informados aproximadamente unos 30, 35 adolescentes o casos donde hemos evidenciado precisamente la violación de esta norma", agregó el director.
La medida, que en su primera fase tiene carácter educativo y pedagógico, se extenderá hasta el 30 de septiembre de 2025. A partir del 1 de octubre, entrará en vigencia un régimen sancionatorio que contempla tres tipos de sanciones: pedagógicas, comunitarias y económicas. Estas últimas podrían alcanzar montos de hasta $730.000, dependiendo de la gravedad de la falta cometida.
De este proceso contempla, en primera instancia, la imposición de un comparendo al padre de familia o acudiente, seguido de una citación en la que se explican los motivos y consecuencias de la sanción. El objetivo es que los adultos responsables comprendan la importancia de cumplir la norma y dimensionen las repercusiones de no acatarla.
"También hemos evidenciado las excepciones, aquellos niños menores de 18 años que de pronto están saliendo de su colegio, que llevan su carnet, eso significa que también se han tomado el detalle de averiguar, de informar y que también la institucionalidad desde el punto de vista de la Secretaría de Educación ha impartido información a todos los docentes y rectores", puntualizó el director.
No obstante, las autoridades también han destacado que en los operativos se han encontrado excepciones válidas, como estudiantes que regresan de sus instituciones educativas portando su carné estudiantil. En estos casos, la medida no aplica, siempre y cuando los jóvenes puedan demostrar que se desplazaban en cumplimiento de deberes académicos.
Desde la administración municipal insiste en que el espíritu de esta medida no es sancionar, sino proteger a la niñez y adolescencia, garantizando entornos más seguros y evitando situaciones de riesgo que puedan vulnerar sus derechos. En ese sentido, se hace un llamado permanente a los padres de familia para que acompañen a sus hijos y sean corresponsables en el cumplimiento de la normativa.
El balance de esta primera semana permite concluir que la medida ha sido acogida con positividad y respaldo ciudadano, aunque las autoridades insisten en que lo más importante será consolidar la fase sancionatoria de manera justa y pedagógica, evitando arbitrariedades, pero asegurando que la norma se cumpla.