IBAL lamenta el fallecimiento de Rodrigo Chisco, quien sufrió un infarto

Consternación y profundo dolor ha generado en Ibagué el fallecimiento de Rodrigo Chisco, funcionario del Instituto Ibaguereño de Acueducto y Alcantarillado, IBAL, quien murió luego de sufrir un infarto mientras practicaba ciclismo en el sector del Alto de Gualanday, una zona frecuentada por deportistas y amantes de esta disciplina.

Rodrigo Chisco hizo parte de la familia IBAL durante más de 20 años, tiempo en el que se destacó por su compromiso, responsabilidad y sentido de pertenencia con la entidad. A través de un comunicado oficial, el instituto confirmó su deceso y expresó su solidaridad con los familiares, amigos y compañeros de trabajo, quienes hoy lamentan la partida de un hombre recordado no solo por su trayectoria laboral, sino también por su calidad humana.

“Con profundo dolor, la familia IBAL lamenta el fallecimiento de Rodrigo Chisco, quien durante más de 20 años entregó su trabajo, compromiso y compañerismo a nuestra empresa. Su recuerdo permanecerá entre nosotros como ejemplo de dedicación”, señaló la entidad, que declaró duelo institucional por la pérdida de uno de sus integrantes más apreciados.

La noticia causó gran impacto entre quienes compartieron con él a lo largo de su vida personal y profesional. Compañeros de trabajo lo describieron como una persona solidaria, respetuosa y siempre dispuesta a tender la mano. Uno de ellos, Benjamín Ricaurte, expresó con evidente tristeza su sentir tras conocer lo ocurrido. “Ay Dios, me quiebro porque Rodrigo, aparte de ser un excelente compañero de trabajo, era un gran ser humano y buen amigo. Hace poco había tomado café con él”, manifestó.

Además de su vocación de servicio, Rodrigo Chisco era un apasionado por el ciclismo, actividad que practicaba con frecuencia y que representaba para él un espacio de bienestar y esparcimiento.