El caso en particular le ocurrió a Alejandra Castillo, joven de 24 años y estudiante de Comunicación Social y periodismo, quien para la época de los hechos en octubre 7 de diciembre de 2016 tenía 23 años de edad y quien afirma, que además de no haberse firmado un contrato, no se le ha querido pagar lo prometido por parte de la entidad que se encargó de la digitalización de todo el archivo de la Secretaría de Tránsito del Municipio.
La joven asegura que inicialmente por parte de una persona identificada como Cristina Varona, se le contactó para que trabajará en el proceso de organización del archivo de esta dependencia, cuando se dio el traslado de la misma a las instalaciones ubicadas en el sector del Poblado, vía Picaleña, siendo contratada de forma verbal y prometiéndole un sueldo de 800 mil pesos.
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Indica la joven que posterior a esto, se le dijo que se le iba a pagar solo 600 mil pesos, argumentando por parte Infotic que solo habría trabajado 20 días, situación que afirma es falsa en cuanto a que ella dice tener las pruebas que demuestran que trabajo más tiempo y que se le debe pagar lo acordado.
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Otra de la situaciones que manifiesta la joven denunciante, tiene que ver con un diálogo que sostuvo con el Alcalde de la ciudad, Guillermo Alfonso Jaramillo, a quien le manifestó lo ocurrido y de quien esperaba una respuesta más concreta, pero que sólo se encontró con una posición en la que se afirma que la administración local gira los recursos a los contratistas y ellos son los que deben responder por los pagos.
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Llama la atención, de acuerdo a lo manifestado por la joven, que sin contrato, ni ningún tipo de vinculación laboral, se le permitió previa orden, tener acceso al archivo y manejo de los documentos allí dispuestos en la Secretaría de Tránsito de Ibagué, por lo que despierta aún más preguntas en cuanto al actuar aparentemente irregular por parte de la entidad contratada por la administración municipal.
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Para finalizar, Alejandra Castillo afirmó que empezó a trabajar 7 de octubre de 2016 hasta el mes de diciembre de este mismo año, exigiendo el pago de lo que trabajo, asegurando que no es la única afectada, pero si la más perjudicada por que ella aceptó este trabajo esperando poder costear su universidad y no pudo hacerlo en esa temporada.
