Cementerio San Bonifacio
Imagen suministrada
12 Sep 2025 02:15 PM

Entre la Tierra y la Memoria: El Metódico Camino hacia la Verdad en San Bonifacio

Tatty
Umaña G.
La cuarta fase forense se extiende por complejidad. Los restos estarían vinculados a hechos en San Juan de la China, Dolores y Roncesvalles.

Cada palada de tierra removida en el cementerio San Bonifacio de Ibagué no es solo un acto forense; es un susurro que emerge desde las profundidades, una esperanza tangible que se eleva sobre el silencio de décadas. A la fecha, la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) en el Tolima ha recuperado 28 cuerpos inhumados en este lugar, un número que, aunque frío en su cifra, encierra un calor humano incalculable. Cada hallazgo es un nombre, una historia, una familia que aguarda en el limbo de la incertidumbre. Esta acción, que trasciende lo jurídico para adentrarse en lo profundamente humano, se enmarca en la cuarta fase de intervención forense y en el Plan Regional de Búsqueda Cordillera Central, una iniciativa que busca devolver la paz a quienes todo lo perdieron, excepto la tenue llama de la esperanza.

La Complejidad de una Misión Humanitaria Sin Precedentes

La cuarta intervención, iniciada el 18 de agosto y cuya conclusión estaba prevista para el pasado 30 de agosto, ha tenido que ser extendida por dos semanas más. La razón no es un mero contratiempo logístico; es un testimonio de la extrema complejidad técnica que supone escudriñar en un pasado dolorosamente enterrado. El tipo de suelos, las características del relleno y la vasta extensión del terreno demandan una meticulosidad que no admite prisas. Se trata de un proceso donde la precisión es una forma de respeto. Además, existe la imperiosa necesidad de garantizar el correcto manejo de los cuerpos, un eslabón fundamental en la cadena que podría conducir a una identificación futura. Este trabajo, lento y deliberado, es el precio de la verdad.

La Ciencia al Servicio de la Dignidad: Arqueología y Osteología

Bajo el sol tolimense, dos equipos forenses especializados combinan el rigor de la ciencia con la sensibilidad de una misión humanitaria. Expertos en arqueología y osteología trabajan en conjunto, empleando técnicas de excavación meticulosas junto con metodologías de documentación y análisis preliminares. Su labor no se limita a desenterrar; se trata de leer en los restos óseos una historia silenciada, de recoger evidencias que permitan establecer, con el mayor grado de certeza posible, si estos cuerpos corresponden a algunas de las miles de personas dadas por desaparecidas en el marco del conflicto armado. Es una carrera contra el tiempo y el olvido, donde cada fragmento cuenta una historia.

El Vínculo con el Territorio: San Juan de la China, Dolores y Roncesvalles

En esta fase, por primera vez, los equipos se han adentrado en una amplia franja de tierra del camposanto que no había sido intervenida anteriormente. La mayoría de los 28 cuerpos recuperados guardarían una conexión directa con hechos violentos ocurridos en la agreste zona rural de San Juan de la China, en Ibagué. Sin embargo, la sombra del conflicto se extiende más allá. Otros restos corresponderían a víctimas de sucesos registrados en los municipios de Dolores y Roncesvalles. Este detalle geográfico confirma una triste realidad: San Bonifacio no es solo un punto de reposo local, sino un símbolo regional del dolor y la desaparición forzada, un repositorio de secretos que involucra a múltiples comunidades del Tolima.

Una Cifra que Estremece: 340 Posibles Historias por Encontrar

Las dimensiones de la tragedia que alberga San Bonifacio son abrumadoras. Según las investigaciones humanitarias y extrajudiciales de la UBPD, en el cementerio se contempla la existencia de al menos 340 cuerpos que cumplen con los criterios temporales y funcionales de su mandato. Sol Cristal Alonso, gerente de la Región Centro de la UBPD, lo expresa con crudeza: “El cementerio San Bonifacio es muy importante para la desaparición en Colombia... tenemos una cifra muy alta incluso comparando a nivel regional”. Esta cifra, 340, deja de ser un número para convertirse en un universo de ausencias, en una herida abierta que late bajo la tierra ibaguereña.

El Significado Humano: Más Allá de la Evidencia Física

Para Cindy Nova, coordinadora territorial de la UBPD Tolima, el valor de este trabajo trasciende con creces lo técnico. “La recuperación de estos cuerpos no solo tiene un valor técnico, sino también humano y simbólico”, afirma. Cada hallazgo representa la posibilidad concreta de que una familia, tras años de angustia, pueda finalmente conocer el paradero de su ser querido. Es la chispa que puede encender un proceso de duelo, de cierre emocional, de digna sepultura. Es la oportunidad de cambiar una pregunta eterna por una lápida con nombre propio, permitiendo que las nuevas generaciones comprendan su historia sin los vacíos del horror.

El Tejido Social que Acompaña la Búsqueda

Ningún esfuerzo de esta magnitud puede realizarse en solitario. La misión en San Bonifacio ha contado con un respaldo fundamental de la Alcaldía Municipal de Ibagué, la Arquidiócesis, la administración del cementerio y, de manera crucial, de organizaciones sociales y personas buscadoras. Recientemente, una velatón liderada por mujeres buscadoras de la ciudad iluminó el camino de la memoria, recordándole a la comunidad que este es un esfuerzo colectivo. Asimismo, el acompañamiento de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) mediante medidas cautelares y los avances investigativos de la Fiscalía a través del GRUBE, demuestran un esfuerzo interinstitucional inédito por priorizar el derecho a la verdad de las víctimas.

El camino por recorrer es aún extenso. Con un universo de 1.548 personas dadas por desaparecidas solo en el ámbito del Plan Cordillera Central, y un registro de 3.171 para todo el Tolima, el trabajo de la UBPD es una promesa de constancia en medio del dolor. Cada cuerpo recuperado en San Bonifacio es un paso firme en ese largo camino hacia la reconciliación. Es un recordatorio de que, aunque la verdad fue enterrada, nunca murió. Y ahora, con paciencia, ciencia y un profundo respeto, Ibagué y Colombia entera empiezan a desenterrarla.

Alerta Tolima te mantiene informado, tus comentarios, denuncias, historias son importantes para nosotros, conviértete en nuestros ojos donde la noticia se esté desarrollando, escríbenos al WhatsApp a través de este link

 

¿Quieres mantenerte informado? Agrégate a nuestro Grupo de Noticias haciendo clic aquí 

Fuente
Alerta Tolima