
"Ellos me salvaron" Conozca la historia de Cristian, un joven con amor infinito por lo perros
Cristian Rodríguez es un Ibaguereño de nacimiento, un hijo que el departamento del Tolima vio crecer, sin embargo, como muchos jóvenes y niños de Colombia su historia no fue para nada fácil, el surgir en un entorno violento y desesperanzador hizo que una serie de decisiones que tomó a tempranas horas de su vida lo dejaran prácticamente en la calle.
Sin embargo, Cristian es el claro ejemplo de resiliencia y dedicación, un joven que, a pesar de poseer diferentes condiciones emocionales y físicas en un punto de su vida, logró encontrar luz en su camino y en el camino de una cantidad enorme de mascotas, de esos seres que se encuentran en la mayoría de los hogares, esos que son mejores amigos, los perros.
Todo se remonta al 2014 cuando Cristian apenas era un jovencito que cómo el mismo lo relata “para ser honesto, en ese momento estaba desorientado, siempre hasta ese punto había tomado malas decisiones, mis caminos no eran los mejores y las noches definitivamente para mi eran terribles…ese día con la preocupación de toda mi familia de que pudiera nuevamente escaparme, nuevamente tomara la calle, nuevamente me sumergiera otra vez en ese mundo oscuro…tomaron la decisión de dejarme ir con el instructor que iba a entrenar a Hannah, mi perrita”, de esta manera empezó el cambio radical en su vida.
Así es como empezó a interesarse en este mundo, el instructor, quién notó un potencial inigualable en él empezó a formarlo para llevar a cabo el hermoso arte del adiestramiento canino, de la mano de esta persona Cristian dio sus primeros pasos en el mundo que él mismo denomina como ‘mágico y único’, junto a su mentor logró empezar a realizar por su cuenta los primeros entrenamientos con el conocimiento empírico que había adquirido durante un largo tiempo teniendo a penas 14 años de edad.
Pero no se quedó solamente con esto, sino que a partir de allí empezó a educarse por medio de libros y vídeos de Youtube, a medida que pasó el tiempo tuvo la oportunidad de acceder a diferentes cursos y métodos de formación académica, obediencia básica, avanzada modificación de comportamiento fueron algunos de ellos, seminarios y escuelas le permitieron conocer a grandes ‘maestros’ como el mismo los llama, quienes lo impulsaron a seguir creciendo profesionalmente, especialmente uno, quien provenía de España, con quien pudo hacer una recopilación de toda su carrera, de todo lo que alguna vez aprendió.
En su bicicleta y soportando cansancio, sol, desaliento llegaba a la casa de las personas que en un inicio le dieron su voto de confianza con sus mascotas, el camino no era fácil, pero a pesar de todas las adversidades, contad de brindar su ayuda y de la manera que fuera, él llegaba a las casas de sus clientes para entrenar a sus perritos.
De recomendación en recomendación logró posicionarse importantemente dentro del arte del adiestramiento en la capital musical, el amor por los perros fue la motivación que llevó a Cristian a ser hoy en día el número uno en Ibagué, así es considerado por las personas que a lo largo de los años ha logrado ayudar con problemas de distintas complejidades que presentaban sus mascotas.
Al día de hoy, es máster en educación canina, con el trayecto impecable que lo caracteriza, sus clientes dentro y fuera del país agradecen el trabajo tan arduo y dedicado que realiza con cada uno de los perros que llegan a sus manos.
“Siempre me he dado cuenta que ellos me salvaron” es lo que expresa nostálgicamente, al recordar que en un tiempo oscuro de su vida, los perros fueron factor fundamental en su desarrollo personal y profesional, la gratitud que les profesa es infinita.
El consejo que sentidamente expresó este joven a las personas es “Tienen un ángel en casa, tienen que valorarlo, tienen que sacarle su máximo potencial, que hay que entenderlos, comprenderlos, me duele cada vez que veo perros heridos, cada vez que veo noticias desastrosas por no comprenderlos, a veces solo es eso, no nos preocupamos por entenderlos, muchas veces los abandonamos porque se salen de las manos y hay una solución, así que la invitación es aproveche ese gran compañero, puede cambiarle la vida”.
Es increíble ver cómo Cristian explota al máximo su capacidad de empatizar con las mascotas y las lleva a tener un comportamiento que no solo alivia muchas situaciones de estrés, ansiedad y diversos problemas que puede presentar un perro sino que sus dueños aprenden a llevarlos correctamente a ser la mejor compañía para cualquier persona o familia.