
Ya se cumplen 39 años de la desaparición de Tulio Enrique Chimonja, agricultor y padre de siete hijos, hecho perpetrado por el frente 13 de la Farc en la vereda el Tabor del municipio de Palestina, sur del Huila.
Tulio, hace parte de los más de mil desaparecidos que registra el Huila, según la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas, y que este martes en el día Internacional de los Desaparecidos son recordados, pero no olvidados.
Y es que en la noche de 1983 llegaron hasta la vivienda de Tulio preguntando por “Tulito”, como cariñosamente le decían. Su esposa María Fanny Coy confirmó que se encontraba en casa, sin imaginar que sería la última vez que iba a ver a su esposo.
La orden de la noche del 3 de septiembre de 1983 fue “traiga sus botas y ropa que nos va acompañar, si le va bien lo regresamos en la madrugada; o si no, en tres días lo devolvemos. Junto a Tulio también llevaban a otro campesino, Rubén Córdova, de tan solo 25 años; a la fecha no se sabe nada de ninguno de los dos”.
La desaparición de Tulio fue ordenada por 'Óscar', 'Jacinto' y 'Ricaute', los comandantes para ese entonces del frente 13 de las Farc, quienes serían los responsables de más desaparecidos en esta zona del departamento del Huila.
Nery Chimonja Coy, una de sus hijas, hace parte fundamental de Conpazcol 'Comunidades Construyendo Paz en Colombia, ella a liderado en el departamento la búsqueda de su padre y de más desaparecidos en el departamento.
Nery indica que su padre es recordado como un hombre fiestero, alegre, amigo de mucha gente, trabajador, campesino caminante de ríos y montañas en su labor de arriero, querido por su familia y la comunidad.
Afirma, que para esa época su padre, no sabía leer, pero era el mejor comerciante de mulas, caballos y muletas, aunque era analfabeta era el mejor Médico veterinario para la época.
Los recuerdos en sus hermanos mayores se mantienen, el nombre de sus caballos, el siete lenguas, el amarillo, el criollo, el careto, el macho moro, el macho treintas, el caballo coral, cada prenda o herramienta hace que Tulio este presente en la memoria y corazón sus hijos, Omar, Enrique, lucy, Bechy,Paola, Nery, Faiber, Janier. El mayor tenía 11 años y el menor ocho meses, el día de la desaparición.